Cada barrio con su Ficci
Cada barrio con su Ficci
Contenido principal del artículo
Resumen
Diez años antes de la aparición del Ficci en 1959, Cartagena tenía poco más de 120.000 habitantes y 29 cines regados por su mapa.
Cada barrio naciente, venía con su propio cine. En 1951, por ejemplo, se inauguran el Cine Miriam, en El Bosque, y ante el crecimiento
poblacional de Lo Amador, aparece el Cine Laurina, en 1952. Para entonces, la gente se juntaba en la casa de algún vecino para escuchar la radio y sus grandes contenidos: el béisbol y el boxeo, los concursos de canto y música, los noticieros y las radionovelas.
Mencionar la radio es clave, porque don Víctor Nieto venía de ese medio desde los años 30 y en su pensamiento de avanzada creó, a principios de los años 50 un centro de entretenimiento alrededor del cine Miramar, en el Barrio Pie de la Popa. En un solo lugar la audiencia encontraba una emisora, una fuente de soda, un cine y una estación de taxis. Muchas películas terminaban al filo de la medianoche; previamente se anunciaba por radio y prensa de la disposición de buses a los distintos barrios. Se trataba de una experiencia cultural muy deseable y novedosa para entonces.