A la chica del visor
A la chica del visor
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Resumen
La ciudad que se viste de tinieblas,
y las olas de su mar que se acrecientan, anuncian que un día ha muerto sobre ella.
Con él muere la esclavizante rutina,
la tediosa monotonía,
el intento absurdo de alcanzar un objetivo
a través de numerosas labores sinsentido.
Su fin le da paso a la imponente noche,
que le promete descanso al caído,
al obrero explotado, al pescador desprotegido,
a mi cuerpo desgastado y aterido,
que en medio de este ruin laberinto
lleno de escollos, tristezas y artificios
busca el sendero que lo lleve a tus labios y sus peligros, como animal salvaje sediento que recorre la sabana en busca de aquel río dulce infestado de cocodrilos.